Aidan Baker | 2007 | Noise of Silence

Ambient | Drone
Aidan Baker (guitarra y tape loops)
Noise of Silence es etéreo, introspectivo e hipnótico; ruidoso; oscuro, pero soñador. Una sola canción de casi una hora que absorbe, atrapa, libera. Otro gran álbum en la discografía de Aidan Baker, acá en su versión remasterizada de 2011.

Enlace | mp3 | VBR
(Ripeo propio)

VOM | 2013 | Altered States

Post-Punk | Gothic Rock | Noise Rock

Oscuro, hipnótico, psicodélico a su manera. El segundo largaduración de los escoceses VOM logra con creces estar a la altura de su excelente debut, adentrándose en un sonido algo más lejano al noise rock, pero sazonado de atmósferas cautivantes y un sonido críptico que sigue la línea del estilo característico de la banda. Uno de los imperdibles de 2013.

Enlace | mp3 | 128 Kbps

The Theatre of Eternal Music | 2000 | Inside The Dream Syndicate Volume I: Day Of Niagara (1965)

Drone | Minimalism
John Cale (viola), Tony Conrad (violín), Angus MacLise (percusión), La Monte Young (voz) y Marian Zazeela (voz)
The Theatre of Eternal Music reunía a algunas de las figuras más importantes del minimalismo: La Monte Young y Marian Zazeela, Tony Conrad, John Cale y Angus MacLise, y Day of Niagara (1965) es un documento imprescindible para cualquier adepto a la música experimental, un álbum en el cual se genera un verdadero trance, un ritual espiritual ruidoso y honesto, una declaración de principios.

Enlace | FLAC

Henry Rollins | 1988 | Hot Animal Machine... Plus

Post-Hardcore | Noise Rock
Henry Rollins (voz), Chris Haskett (guitarra y voz de fondo), Bernie Wandel (bajo y voz de fondo) y Mick Green (batería y voz de fondo)
En Hot Animal Machine... Plus (que reúne el primer disco de Henry Rollins como solista, Hot Animal Machine, y su EP Drive by Shooting) Rollins toma lo mejor del legado de Black Flag y lo lleva al extremo con la rabia frenética que lo caracteriza, incorporando elementos de noise rock y rock alternativo, y explorando incluso ciertas sendas experimentales, sobre todo en las últimas canciones. Es ecléctico, entretenido e intenso. Uno de los puntos más altos en la carrera de Rollins, incluso considerando sus años en Black Flag.

Enlace | mp3 | 320 Kbps

Red Temple Spirits | 1988 | Dancing to Restore an Eclipsed Moon

Gothic Rock | Post-Punk
William Faircloth (voz), Dallas Taylor (guitarra), Dino Paredes (bajo) y Scott McPearson (batería)
En su debut, Red Temple Spirits plasmaron una sensibilidad oscura cautivante y catártica que parece más bien de una banda ya con trayectoria. Dancing to Restore an Eclipsed Moon es un ritual sónico en que se mezclan el gothic rock, el post-punk, el rock alternativo y la psicodelia como si nada, con una naturalidad llamativa. Quizás no es un álbum para cualquier momento, pero en el instante preciso, es claro que es uno de esos discos especiales. Lástima que la trayectoria de la banda sólo diera un fruto más, el inferior 'If Tomorrow I Were Leaving for Lhasa, I Wouldn't Stay a Minute More...'. Pero eso es ya para otra ocasión.

Enlace | mp3 | 192 Kbps

Disappears | 2013 | Era

Post-Punk | Noise Rock
Brian Case, Jonathan Van Herik, Damon Carruesco y Noah Leger
Si en Pre Language Disappears se adentraron en un terreno más cercano al krautrock que al indie revival de Lux y Guider (sus predecesores, con un estilo similar al de The Horrors y TOY), Era marca una nueva transición sónica del cuarteto de Chicago, en la que exploran atmósferas más oscuras y más densas, pero, sin duda, conservando la frescura de su sonido y las influencias del noise rock y la psicodelia de las cuales el álbum está lleno de pinceladas brillantes. Disappears logró madurar en su estilo y exprimir de un modo idóneo el talento algo más en bruto que se presentaba en sus discos anteriores, y que ahora se desenvuelve a rienda suelta sin dificultades ni tropezones, sonando sólidos, seguros y con clase. Era suena lúgubre sin ser opresivo, logrando atmósferas inéditas en la discografía de la banda. No es un álbum para cualquiera, claro, pero yo fui uno de esos a los que enganchó a la primera.

Enlace | mp3 | 320 Kbps

Lou Reed | 2007 | Hudson River Wind Meditations

Ambient | Drone
Lou Reed
Hudson River Wind Meditations fue el último álbum de estudio que Lou Reed grabó en solitario, alejándose del rock y re-incursionando en una atmósfera más meditativa y etérea. Y digo "re-incursionando" porque este no es terreno inexplorado por Lou. Recordemos Metal Machine Music y, más particularmente, los momentos más improvisacionales de The Velvet Underground –"The Nothing Song" y "Melody Laughter"–, en que se rompía con el esquema de canción tradicional y se ahondaba en experimentaciones libres, honestas y puras, impolutas de toda regla. Hudson River Wind Meditations rescata un poco de ese espíritu, pero lo traslada conceptualmente al ambient y al drone en su sentido más electrónico y en una aproximación más bien ligada al new age. El resultado son cuatro piezas de melodías hipnóticas, de atmósferas cautivantes y de una solemnidad catártica. Suena como un adiós de parte de un Lou Reed en completa parsimonia; un álbum que en su sencillez logra ser hermoso y perfecto con una sutileza admirable.

Enlace | mp3 | 320 Kbps

Captain Beefheart and His Magic Band | 1967 | Safe as Milk

Psychedelic | Blues Rock
Don Van Vliet (voz, armónica, marimba baja y shehnai), Alex St. Clair Snouffer (guitarra, bajo y voz de fondo), Jeff Cotton (guitarra), Ry Cooder (guitarra, bajo y guitarra slide), Richard Perry (clavecín), Jerry Handley (bajo y voz de fondo), John French (batería, percusión y voz de fondo), Milt Holland (percusión), Dr. Samuel J. Hoffman (theremin), Taj Mahal (percusión) y Russ Titelman (guitarra)
En el debut de Captain Beefheart y su Magic Band, Safe as Milk, la banda liderada por Don Van Liet logró fusionar las raíces del blues con la energía del rock psicodélico y un espíritu experimental y vanguardista que le significó consagrarse como uno de los discos más influyentes de la historia del rock. No hay mucho más que agregar a eso. Safe as Milk es, ante todo, un clásico al que no le pasan por encima los años.

Enlace | mp3 | 192 Kbps

Palms | 2013 | Palms

Post-Rock | Post-Metal
Chino Moreno (voz y guitarra), Bryant Clifford Meyer (guitarra y teclado), Jeff Caxide (bajo) y Aaron Harris (batería)
La unión de Chino Moreno y tres ex-Isis –Bryant Clifford Meyer, Jeff Caxide y Aaron Harris– no podía no dar buenos resultados, y Palms, el debut homónimo de la banda, es prueba innegable de eso. Con un sonido post-rockero que por momentos se desborda inevitablemente al post-metal, el cuarteto crea una atmósfera soñadora y etérea en la que la voz de Moreno destaca esa sensibilidad que también se ha manifestado en su trabajo con Deftones y Team Sleep. El álbum suena poderoso, pero al mismo tiempo delicado y, sobre todo, emocional. No suena a Isis ni a Deftones ni a Team Sleep ni a Crosses. Es un sonido nuevo y, sin embargo, que emana cierta nostalgia. Es, en definitiva, un álbum muy bien logrado, excelentemente producido y hermosamente catártico.

Enlace | mp3 | 320 Kbps

Black Flag | 2013 | What The...

Post-hardcore
Ron Reyes (voz), Greg Ginn (guitarra, theremin, órgano y bajo), Gregory Moore (batería y voz de fondo), Matthew Cortez (batería en "Off My Shoulders") et al.
El regreso de Black Flag ha estado lleno de polémica. Primero, porque para muchos la reunión no se dio con una formación ideal (Ron Reyes y Greg Ginn son los únicos miembros originales de la banda). Segundo, por toda la batalla legal entre Greg Ginn y FLAG, otra reunión de Black Flag con una alineación bastante más atractiva, que incluye a Keith Morris, a Chuck Dukowski, a Bill Stevenson y a Dez Cadena. Tercero, porque los videos de los conciertos de esta gira de regreso dan una imagen, en el mejor de los casos, desastrosa y decadente. Y cuarto, porque los singles que han precedido a What The... no han estado, en general, a la altura del catálogo de Black Flag. Entonces, las expectativas son bajas o nulas. Pero démosle una oportunidad.
Veamos lo malo primero: What The... suena grabado a la rápida, no a conciencia y con poco ensayo, y está pobremente producido. La calidad compositiva de Ginn está a años luz de la de antaño y su capricho de incluir un theremin resulta fuera de lugar. Además, pareciera estar corto de riffs: muchas de las canciones son prácticamente lo mismo. El baterista Gregory Moore es un desastre, y no sobrevive ni a la más mínima comparación con Robo, y para qué decir con Bill Stevenson o Chuck Biscuits. Por su parte, Ron Reyes suena exactamente igual en todas las canciones. No matiza y tiende a gritar mecánicamente, sin emoción. El disco en general se hace muy largo. Hay muchas canciones que no agregan nada y que, en definitiva, tienden a aburrir y a ser mal relleno.
Pero sí: sí hay algunas cosas buenas. Ginn suena sólido, tanto en guitarra como en bajo (el disco fue grabado antes de que Dave Klein se integrara a la banda), dando muestras de un virtuosismo bien digerido y asentado, y tan ruidoso y frenéticamente caótico como siempre. Por otro lado, entre tanto relleno también hay canciones destacables. Puedo mencionar My Heart's Pumping, Wallow in Despair, The Chase, It's No My Time to Go-Go y la que cierra el disco, Off My Shoulders.
En suma, y en una visión completamente personal, creo que el desastre pudo ser peor. Ciertamente, What The... no está ni remotamente a la altura de discos como Damaged, Loose Nut o Slip It In, pero sí tiene momentos de esa magia olvidada. Sin embargo, en general el sonido de la banda ha caído en una comodidad aburrida, en que predomina el post-hardcore simple y sin el afán experimental y transgresor que caracterizó a álbumes como Family Man o The Process of Weeding Out, lo que deposita a Black Flag en una monotonía disuasiva.
Pero en esta dialéctica podemos citar otro aspecto positivo: es un disco desafiante. No entra a la primera. De hecho, en la primera escucha los sutiles matices no se perciben, y sus puntos altos pueden incluso pasar inadvertidos. Esta dificultad lo hace más dinámico y tal vez incluso entretenido. Es, en síntesis, un álbum que sin ser brillante, merece una oportunidad, y que en sus momentos de luz permite recordar por qué Black Flag es una de esas bandas claves en la historia de la música. La crítica es que esos momentos de luz son escasos. Pero, de nuevo, pudo ser peor.

Enlace | mp3 | 320 Kbps

 
Hijos de Saturno